Editorial de Cucos – 8 de Agosto

La Historia y sus posibilidades

       El término acontecimiento nombra la alteración azarosa, singular y continua cuyos efectos modifican el sentido de lo histórico, lo social o lo político. Lo interesante es que el acontecimiento solo puede ser observado como tal luego de sucedido, por eso es azaroso, por eso la historia no es dialéctica, porque no necesariamente un conjunto de hechos determinaran un acontecimiento. Puede fallar decía uno. No sabemos si la marea verde que hoy inunda el país generara un acontecimiento, esto sería, la aprobación de una ley que legalice el aborto, pero si no se diera igualmente ahí están las condiciones, la fuerza y la convicción de generar actos que cambien de raíz los sentidos de los cuerpos, de las costumbres, en definitiva, de lo político.
Los medios establecen una agenda mediática que también busca el acontecimiento, con la sutil diferencia que no hay nada de azaroso, y que en el caso de nuestro periodismo independiente, blanco y puro, no tiene nada de sorprendente. Que seamos paranoicos, no significa que no nos estén siguiendo, porque nadie, pero nadie dudaba de que luego de saberse que este gobierno hizo fraude para ganar elecciones (para decirlo claro), nadie dudaba de que la justicia, que también es independiente blanca y pura, se sacaría la modorra de la feria judicial y crearía un acontecimiento que taparía cualquier cosa que estuviese ocurriendo. Miren lo que hicieron estos populistas, miren qué grave es, miren todas estas pruebas que conseguimos. Pero como las drogas que se comieron las ratas, las pruebas aparecen y desaparecen horas después, pero por suerte hay fotocopias. O sea, un tipo anotó todo en cuadernos para dejar pruebas, después quemo todo para no dejar pruebas, pero antes saco copias para tener la prueba. Uno empieza a pensar que el caso es muy complicado…
Otra cosa que es complicada es, por ejemplo, intentar cobrar un cheque con la fotocopia del documento, o que vallas manejando y te pare la cana y le muestres una copia del registro. Ni siquiera podes pagar la carne de la semana en 12 cuotas, porque el carnicero no te acepta la tarjeta de crédito y esa copia toda oscura que le mostrás como DNI. Sí podes armar una causa, meter gente presa, hacer un show y que todos hablemos de eso por un rato, el suficiente para que no te des cuenta que tu sueldo es más chico que hace 10 días, y que nada indica que la situación social y económica mejore algún día…
Ahora, cuando estos señores se deciden a violentar el marco de su propia legalidad burguesa, y se cae el encantamiento de la derecha democrática, aparece el viejo y conocido autoritarismo, y acá, justo en este punto, es donde lo que empieza a faltar es una contundente respuesta organizada que no negocie, que impida claramente que se destruyan todos los contratos que hacen que nos llámenos una sociedad, un pueblo, una Nación, díganlo como quieran, un colectivo de gente con los mismos objetivos comunes.
La iglesia hoy se ha movilizado en contra de una ley en post de defender 2 vidas. La misma iglesia que miraba para otro lado cuando torturaban embarazadas en los campos y se apropiaban de niños en los hospitales clandestinos .Hoy tal vez se jueguen muchas más cosas que la aprobación de una ley que es justa en tanto reconoce el derecho de los cuerpos gestantes a decidir sobre ellos mismos, hoy tal vez sea el comienzo de un camino que pueda terminar en un movimiento emancipador. Hoy pude ser el comienzo de un acontecimiento que cambie profundamente la vida de todos. No lo sabremos hasta solo después que ocurra, pero esta marea verde que todo lo inunda nos recuerda algo que tal vez olvidamos ya, y es que no hay poder que pueda oponerse a un pueblo que sale a la calle, con un objetivo y organizado. La posibilidad está en nosotros, la historia de un país será siempre la historia de sus pueblos.